Sentimientos latentes


Si, acá me tienes, refugiándome de nuevo en palabras, con poca retórica y jerga barata. No quiero extenderme ni ponerme a balbucear con palabras a las que quizá deba buscarles el significado. Solo quiero abrirme por completo por si quizá no lo he hecho.

Es difícil entender un poco lo que me pasa, es difícil vivir lo que vivo, porque por primera vez en mucho tiempo, no puedo controlar lo que siento, y cada vez, cada día, cada momento, se hace más real.

Las palabras de lo hablado, las risas causadas en momentos de cariño, o incluso los besos ocultos, los que medianamente se han hecho relucir, los abrazos estrujadores, las miradas coquetas, o las caricias entre manos que han surgido, son razones suficientes para estar cada vez más seguro de que hay un algo, un sentimiento extraño del que simplemente decidí dejarme llevar.

¿Está bien? No lo sé, y por más que trato de hallar una respuesta, concluyo que sea como sea, no lo quiero dejar de hacer. No puedo, no me siento capaz. Porque he descubierto que, con verte en esos momentos de debilidad, de estrés o de ira, puedo calmarme, sonreír, ser yo.

Pienso mucho, más de lo que debería. Le doy mucha retórica, pienso, analizo, observo, vuelvo a pensar y creo incógnitas en mi: ¿le gusto de la misma manera? ¿Pensará lo mismo que yo? ¿Se sentirá bien cuando sucede? Mas y más preguntas sin respuesta. Nada concreto. Pero que, para ser sincero, tengo algo de miedo entenderlas, y saber la respuesta.

Eres callada, en todo momento solo respondes a mi coqueteo, vagamente eres tu quien lo hace, pero si, lo disfruto, lo imagino, y sueño que se haga realidad. Así que acá me tienes, escribiendo una carta, abriendo un espacio de mi para dejar fluir estos sentimientos latentes, sentimientos que poco a poco se han apoderado de mí y que resultan ser vívidos y fuertes.

Acá me tienes pensando en ti, deseando que me leas, pero que por nada del mundo decidas tomar distancia. Independiente de si deseas o no seguir mirándome de la manera en que lo haces, besándome (quizá en un futuro) en un semáforo mientras conduces, o a escondidas en la calle, solo pido que no te apartes, porque sea la manera en que suceda, si algo tengo claro es que te quiero en mi vida, y no permitiré que te apartes de ella.

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