Recuerdos (corto)

Si de confesiones se trata y quieres hablar, lo hacemos. Confieso que aún vivo con recuerdos de nosotros, tan activos y vivaces como si siguieran sucediendo esos momentos en los que solo estábamos tu y yo, caminando, riendo, hablando, tomando café…

Confieso que aún hay mañanas en las que despierto creyendo que estarás a mi lado. Que podré darte un beso antes de meterme a la ducha y al poco tiempo llegarás desnuda a bañarte junto a mí. Que recuerdo esa última vez que estuvimos juntos como si acabara de pasar. Aún siento mis manos toscas recorriendo tus piernas suaves, mientras nos fundíamos en un beso pasional y poco usual. Recorriendo tu piel con la codicia de quien lo tiene todo frente suyo y no lo quiere soltar jamás. Quitándote cada prenda con fuerza pero con sutileza, tocando tu ser mientras observo como el placer te invade y te desinhibe por completo.
Puedo confesar también en este momento que recuerdo las noches de sushi, de pizza y comida chatarra con juegos de mesa y cerveza oscura. Que recuerdo las noches en las que –tomando- me obligabas a beber directamente de la botella hasta que caía nulo en la sala mientras tu reías porque una vez más habías logrado emborracharme.
Recuerdo también aquellas noches de películas los fines de semana, cuando te quedabas dormida en mi pecho liberando de ti todo el cansancio de una ajetreada semana laboral.
Recuerdo esos besos a escondidas, las negaciones cuando nos preguntaban por qué sonreíamos tanto al vernos y los abrazos fuertes de reencuentros.
 
Hoy te puedo confesar que esos recuerdos me mantienen vivo, que me llenan de añoranza, pero también de paz y alegría. Esos recuerdos aún me hacen sonreír mientras estoy en el bondi camino al trabajo o en mi bicicleta subiendo la montaña. Están recios en mi pecho y en mi cabeza y me motivan a continuar, a luchar por esos sueños de los que fuiste parte y causante.
Hoy, sencillamente puedo confesarte que soñar despierto, cuando se trata de ti, es una realidad que quiero vivir hasta el día que lo deje de soñar y se cumpla.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pensamientos de madrugada VI

Inexplicable

Pensamientos de café